El documento discute el soporte nutricional para pacientes críticos. Enfatiza que la nutrición enteral es la vía preferida siempre que sea posible, y debe iniciarse temprano. La nutrición parenteral solo debe usarse cuando la enteral esté contraindicada o sea insuficiente. El documento también explora controversias sobre el momento de inicio, objetivos calóricos y proteicos, y el uso de glutamina y diferentes fórmulas lipídicas en nutrición parenteral.