La presión arterial se mide en mmHg y se expresa mediante la presión sistólica y diastólica. La presión sistólica normal está entre 90-140 mmHg y corresponde a la contracción del corazón, mientras que la presión diastólica normal está entre 60-90 mmHg y corresponde a la relajación del corazón. El tensiómetro se usa para medir la presión arterial y consta de un manómetro, manguito y estetoscopio.