El documento describe tres estrategias para evaluar los medios TIC: 1) Autoevaluación por los productores, que tiene ventajas como la aceptación de críticas y mejora continua pero puede faltar objetividad; 2) Juicio de expertos, que aporta calidad pero es subjetivo; 3) Evaluación por y desde los usuarios, que es la más importante pues los destinatarios evalúan directamente la eficacia y significado de los medios TIC aunque requiere más tiempo y recursos.