La insuficiencia venosa crónica es uno de los problemas a nivel mundial más importante, el cual tiene un gran impacto socioeconómico y social.
En esta sesión nuestro objetivo es el aprender a diagnosticar a tiempo una insuficiencia venosa y el saber tratar sus complicaciones.
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(2021 05-18) insuficiencia venosa cronica y sus complicaciones (doc)
1. INSUFICIENCIA VENOSA
CRÓNICA Y SUS
COMPLICACIONES
AUTORES: Celada Suarez, María Carmen
López Diego, Celia
FECHA: 18/05/2021
2. 2
Índice
1. Caso clínico e introducción
2. Epidemiología
3. ¿Qué es la Insuficiencia Venosa Crónica?
4. Manifestaciones
5. ¿Cuáles son las principales complicaciones?
6. Úlceras
7. Diagnóstico
8. Tratamiento no quirúrgico y abordaje de factores de riesgo
9. Terapia compresiva
10. Terapia farmacológica
11. Terapia invasiva
12. ¿Cuándo derivar a cirugía vascular?
13. Puntos clave
14. Bibliografía
3. 3
CONTENIDO
CASO CLÍNICO
Mujer de 58 años que acude a nuestra consulta porque, desde hace unos meses, presenta
unas manchas oscuras en los tobillos, que no desaparecen. Además, el dolor y la pesadez
en las piernas, motivo por el que ya había consultado en otras ocasiones, han empeorado
en estos meses de verano. Trabaja como peluquera y refiere que se le hinchan los tobillos
al final de su jornada laboral. En la exploración física presenta unos valores de presión
arterial de 130/75 mmHg, el índice de masa corporal es 29, la frecuencia cardíaca 78
latidos por minuto,la auscultacióncardiopulmonar no muestraalteracionessignificativas,
y se observa hiperpigmentación supramaleolar y venas varicosas en ambas piernas.
Últimamente las medidas generales para las varices no mejoran sus síntomas.
La enfermedad venosa crónica (EVC) constituye una patología conocida desde la
antigüedad que afecta a un 25% de la población adulta occidental. En el año 2009 se
consensuó su definición como cualquier anormalidad morfológica y/o funcional del
sistema venoso de larga evolución, manifestada mediante signos y/o síntomas que
requieren de investigación y/o atención médica.
La EVC conlleva alteraciones estéticas, así como, limitaciones físicas y emocionales en el
paciente y consumo de gran cantidad de recursos socio-sanitarios asociados a costes
laborales importantes. El volumen de visitas diarias que debe atender el médico de
familia y la falta de una formación específica en patología vascular durante su residencia,
contribuyen a un desfase inusual en el manejo de la EVC. La administración sanitaria
tampoco le concede la suficiente importancia yla relega a enfermedadmenor por su baja
mortalidad, por lo que apenas se contemplan medidas en sus planes sanitarios.
El lugar del médico de Atención Primaria en el Sistema Sanitario como primer contacto
del paciente lo erige como una de las figuras más importantes en la prevención y manejo
de la Enfermedad Venosa Crónica (EVC).
EPIDEMIOLOGÍA
La EVC es la enfermedad vascular más frecuente del ser humano. Es más frecuente en
mujeres que en hombres. El 25-30% de mujeres y 10-40% de hombres occidentales
tienen varices. La incidencia anual de varices, según el estudio Framingham, está en el
2,6% para las mujeres y en el 1,9% para los hombres. La prevalencia de la EVC aumenta
linealmentecon la edad pero puede aparecer en niños y adolescentes. El 77% de mujeres
mayoresde 70 años tienen varices.El pico de incidencia de la EVC ocurre a los 40-49 años
en mujeres y 70-79 años en hombres.
La EVC tiene un gran impacto socioeconómico debido al elevado número de personas
afectadas, el coste de las consultas y del tratamiento, así como el deterioro de la calidad
de vida por situaciones incapacitantesque conducen a un grannúmero de bajaslaborales
(costes indirectos).
Dentro de los factores predisponentes para la EVC se reconocen los siguientes:
4. 4
Genéticos: parece que existe una predisposición genética. La EVC se transmite de
forma variable, unas veces con carácter recesivo y otras dominante. Algunos
trabajos muestran que el riesgo de que los hijos desarrollen venas varicosas es
del 89% si ambos padres sufren EVC, del 47% si solo un progenitor la sufre y del
20% si ninguno de ellos tiene evidencia de EVC.
Edad: es el principal factor de riesgo. Con la edad se producen cambios
estructurales en la pared venosa que facilitan su dilatación. Es un factor de riesgo
independiente.
Sexo: es el segundo factor en importancia.Predomina enel sexo femeninoa razón
de 2-8:1 con respecto al hombre, aunque en estudios poblacionales no hay
diferencia de sexo, presentando varices con la misma frecuencia. Sin embargo,
hay una mayor incidencia de varices reticulares y telangiectasias en la mujer,
mientras que en el hombre predominan las tronculares y estadios más avanzados
de enfermedad.
Peso: se ha demostrado repetidamente en los estudios poblacionales una mayor
incidencia de EVC en obesos o con sobrepeso importante
Gestación: la EVC es más frecuente en mujeres multíparas. El embarazo
favorecería la aparición de EVC a través de 3 mecanismos: los cambios
hormonales que tienen lugar durante el embarazo que provocan disminución del
tono venoso, el incremento de la volemia y el aumento de la presión
intraabdominal que altera el retorno venoso.
Raza:es más frecuente en raza blanca y muy poco común en raza negra y asiática.
Se ha descrito una mayor frecuencia de aparición de EVC en países nórdicos y
centroeuropeos que en países mediterráneos.
Hábitos intestinales: el estreñimiento favorece la aparición de varices por un
aumento de la presión intraabdominal.
Exposición al calor:puede producir una venodilatacióncutánea y enlentecimiento
circulatorio.
Compresiones: locales o selectivas (prendas de vestir ajustadas, vendajes,
cinturones, medias, zapatos...).
Ocupación laboral: aumenta su incidencia en trabajos con bipedestación
prolongada.
Tratamiento hormonal: La toma de anticonceptivos orales se ha relacionado con
la aparición de EVC. Altas dosis de progesterona aumentan la distensibilidad
venosa y altas dosis de estrógenos aumentan la hipercoagulabilidad
La presentación clínica de la enfermedad venosa crónica (EVC) es variada y cambiante.
Su evolución va desde problemasestéticos hasta la presencia designos graves,entreellos
la aparición de úlceras. Los síntomas, aunque son inespecíficos, nos pueden orientar
hacia su presencia por lo que es necesario su conocimiento al igual que los trastornos
dérmicos asociados.
¿QUÉ ES LA INSUFICIENCIA VENOSA CRÓNICA?
La insuficiencia venosa crónica (IVC) es un estado de dificultad para el retorno venoso,
con independencia de la postura y la actividad, pero más notorio en una bipedestación
5. 5
inmóvil, y en el que la sangre venosa fluye en sentido opuesto a la normalidad (desde
el SVP al SVS).
Para que la sangre fluya correctamente desde las zonas más distales de los miembros
inferiores a las más proximales es necesario que el sistema venoso funcione
adecuadamente. Y para conseguirlo disponemos del sistema venoso superficial, el
profundo y las venas perforantes. Todas estas venas están provistas de válvulas que
actúan en sentido unidireccional hacia el corazón, que junto a la acción de la bomba
muscular mediante contracciones, hacen que la sangre pase del sistema superficial al
profundo a través de lasvenas perforantespara llegar,ensentido ascendente, al corazón.
Si alguno de estos elementos falla, se produce un reflujo venoso anormal y, como
consecuencia, una hipertensión venosa patológica. Dicha presión alta mantenida se
manifiesta en la macrocirculaciónenforma de varices,dilatacionesvenosas superficiales,
y a nivel de la microcirculación, como alteraciones cutáneas2,3.
La etiología de la IVC en la mayoría de los casos (95-97%) es primaria o idiopática,de tipo
congénito y con frecuencia hereditario, aunque en un 4-5% es secundaria a una
trombosis venosa profunda o síndrome postrombótico. En otras ocasiones las
alteraciones se producen por compresión extrínseca o malformaciones El factor
determinante de la aparición de la EVC primaria, forma más frecuente, es la
incompetencia de las válvulas venosas por una alteración de las mismas o por un defecto
idiopático estructural de la pared venosa, o por ambos mecanismos; lo que provoca
dilatación venosa con fallos en el cierre de sus válvulas.
MANIFESTACIONES
Varices
Dilatación de las venas del sistema venoso superficial, secundario a la
hipertensión venosa.
Pueden ser (Tabla 1):
o Telangiectasias: vénulas intradérmicas o subepidérmicas dilatadas, de menos
de 1 mm de calibre, que tienden a confluir. También conocidas como arañas
vasculares o capilares.
o Reticulares: venas subdérmicas localizadas en la dermis reticular, tortuosas,
de color azulado, con un calibre entre 1 y menos de 3 mm.
6. 6
o Venas varicosas o tronculares: son venas subcutáneas dilatadas de 3 o más
mm de diámetro, a menudo tortuosas
Dolor: Suele ser de carácter difuso, no localizado, subagudo o crónico. Se
exacerba con tratamientos hormonales (anticonceptivos), sedentarismo,
bipedestación prolongada o altas temperaturas. Los dolores tardíos son más
frecuentes, se intensifican durante el transcurso del día, aliviándose con el
ejercicio,el fríoo la deambulación. Los dolores de tipo inmediatosuelen aparecer
al levantarse, como una sensación de llenado que recorre el miembro. También
es frecuente el dolor en el decúbito, con sensaciones de piernas no descansadas
o inquietas. Los dolores puntuales, generalmente agudos, suelen ser
manifestaciones de complicaciones como una flebitis superficial. (Tabla 2)
Tabla 2. DIAGNOSTICO DIFERENCIAL DEL DOLOR EN EXTREMIDADES
ORIGEN CARACTERÍSTICAS FUNDAMENTALES
Venoso (TVP) Pesadez, aumenta en bipedestación,
unilateral
Venoso (EVC) Pesadez, aumenta en bipedestación,
bilateral
Arterial (Claudicación intermitente) Intenso, aumenta con la deambulación
Tabla 1
7. 7
Neurológico (radiculopatía) Irradiado por la metámera
correspondiente
Neurológico (mononeuritis) Irradiado por el territorio del nervio
afectado
Neurológico (polineuropatía) Distribución ascendente en calcetín
Articular (artrósico) Mecánico. Empeora con la movilidad y
mejora en reposo
Articular (artrítico) Localizado, sordo. No mejora totalmente
con el reposo.
Neuropatía venosa Constituye síntomas diversos consistentes en sensaciones de
presión, opresión, quemazón, pinchazos, picadura, desgarro, palpitaciones o
escalofríos que se exacerban de forma importante en las menstruaciones y
embarazo. Su origen está relacionado con el estado inflamatorio de la
enfermedad.
Pesadez Afecta sobre todo a las piernas. Aparece tras bipedestación prolongada.
Suele ser de intensidad gradual, vespertina y disminuye con el reposo con el
miembro elevado y/o ejercicios de relajación de la musculatura de los miembros.
Edema aumento de líquido en espacio intersticial en consecuencia del aumento
de la presión venosa capilar que lleva a la fuga de fluído desde el espacio
intravascular. Son blandos y dejan fóvea, mejorar con el decúbito y al elevar las
piernas. (Tabla 3)
Tabla 3. DIAGNOSTICO DIFERENCIAL DE TIPOS DE EDEMA EN EXTREMIDADES
Calambres Suelen aparecer de noche o ligados al esfuerzo y al calor. Afectan a los
músculos de la pierna, sobre todo pantorrilla y pie. Suelen despertar a los sujetos
obligándolos a levantarse para masajearse la pierna. No son patognomónicos de
enfermedad venosa.
Tipo de edema Características
Venoso (TVP) Blando, doloroso, aumenta en
bipedestación, unilateral
Venoso (EVC) Blando, no doloroso, aumenta en
bipedestación, bilateral
Insuficiencia cardíaca Blando, no doloroso, mejora en decúbito,
bilateral
Síndrome nefrótico Blando, no doloroso, afecta a otros
territorios
Linfedema Duro, no doloroso, no mejora en
decúbito, uni/bilateral
Quiste de Baker roto Blando, doloroso, instauración rápida,
unilateral
celulitis Blando, doloroso, instauración rápida,
localizado, inflamación
8. 8
¿CUÁLES SON LAS PRINCIPALES COMPLICACIONES?
Se dividen en cutáneas y vasculares.
• Cutáneas:
o Dermatitis ocre: hiperpigmentación supramaleolar por extravasación de
hemosiderina (figura 2).
o Eccema varicoso: se localiza fundamentalmente en el tercio inferior de los
miembros inferiores.
o Hipodermitis:zonas despigmentadaspor atrofia del tejido conectivo laxo (figura
3).
o Celulitis: por afectación del retorno venoso junto a alteraciones endocrinas. Es
mucho más frecuente en las mujeres.
o Lipodermatosclerosis:alteracióntrófica yreversible,de coloraciónrojiza y ocre,
habitualmente comprendida entre maléolos y rodillas (figura 4).
o Atrofia blanca: zona de atrofia cutánea perimaleolar de aspecto blanco marfil.
Puede ser dolorosa y, como la lipodermatosclerosis, puede evolucionar a la
ulceración.
o Úlcera venosa (figura 5).: supone el estadio más avanzado de la enfermedad. Lo
presentan hasta un 2% de los pacientes con IVC7. Constituye un defecto de
espesor completo de la piel que generalmentese localizanenla regiónmaleolar
medial. Presentan forma redondeada y de varios centímetros de tamaño. Son
poco dolorosas si no están sobreinfectadas. Generalmente se cronifican y/o
recidivan. El diagnóstico diferencial se debe hacer con la úlcera arterial,
hipertensiva, y neuropática (Tabla 4).
• Vasculares:
o Varicorragia: hemorragia externa de una vena varicosa, de forma espontánea o
tras un traumatismo. Generalmente indolora, aparece sobre lesiones
Tabla 4
9. 9
preulcerosas, con una capa epidérmica muy fina y de color azulado. También
puede haber sangrado interno con la aparición de hematomas o equimosis.
o Varicoflebitis: trombosis en una vena varicosa del sistema venoso superficial.
Cursa con dolor intenso, eritema y endurecimiento local (generalmente nódulo
o cordón indurado). Habitualmenteevoluciona de forma benigna. En ocasiones,
hay que hacer diagnóstico diferencial con la trombosis venosa profunda (TVP),
sobre todo si hay afectación de la vena safena externa, ya que la porción
superior de la vena es subaponeurótico y su obliteración adopta el aspecto de
una pierna hinchada y dolorosa sugestiva de TVP. No se ha podido demostrar
que los pacientes con varicoflebitis desarrollen más TVP o TEP
(tromboembolismo pulmonar)9, aunque en el caso de que se propague hasta el
cayado de la safena sí existe riesgo de TVP o embolización pulmonar debido a
la incompetencia valvular a ese nivel14.
10. 10
DIAGNÓSTICO
Un diagnóstico adecuado y la clasificación precisa evolutiva del problema venoso crean
la base para un correcto tratamiento de la EVC.
Clínico
Tras haber recogido una buena anamnesis con los factores de riesgo y evolución de la
enfermedad, la evaluación clínica debe centrarse en los síntomas y signos de la
enfermedadvenosa, y el examenfísico,con el paciente de pie en una habitacióncaliente,
con buena luz, debe establecer las características y distribución de las varices y otras
alteraciones dermatológicas, mediante la inspección, palpación y auscultación. En todo
paciente con EVC se recomienda medir el perímetro de la pierna de manera bilateral y
comparativa utilizando una cinta métrica para establecer la presencia de edema; una
diferencia mayor de1 cm es significativa.Enalgunoscasos,la EVC es asintomática a pesar
de asociar varices u otro signo.
11. 11
• Clasificación CEAP (Tabla 5): en el año 1994 el American Venous Forum elaboró
un documento de consenso para la clasificación y gradación de la insuficiencia
venosa crónica basado en lasmanifestacionesclínicas(C),factoresetiológicos(E),
distribución anatómica (A) y hallazgos fisiopatológicos (P), que fue revisado en
2004. Surgió como un instrumento para facilitar la comunicación y descripción de
las formas de la EVC. El objetivo de esta clasificación es determinar la presencia
de signos y síntomas, gravedad clínica, localización y el tipo de enfermedad
venosa (primaria, secundaria o congénita).
Hemodinámico
Se realiza con posterioridad al diagnóstico clínico para descartar o confirmar la patología
sospechada. Por tanto, permite establecer la presencia o ausencia de la enfermedad y su
repercusión hemodinámica. Los métodos no invasivos deben realizarse con anterioridad
a cualquier técnica invasiva. De entre las diferentes técnicas, el eco-doppler es el gold
standard y superior a la flebografía.
Utilización de métodos diagnósticos según la clasificación CEAP
Estadios C0-C1: historia clínica y examen físico, que puede completarse con
Doppler de bolsillo o eco-Doppler color (Nivel I).
Estadio C2 sin edema ni trastornos cutáneos: se debería utilizar el nivel II
(utilización de laboratorio vascular no invasivo con examen eco-Doppler
detallado, con o sin utilización de pletismografía) en la mayoría de los pacientes y
es condición imprescindible en aquellos pacientes considerados para
intervención. El nivel III (se añaden a los anteriores exámenes invasivos y estudios
de imagen complejos como flebografía ascendente o por punción transfemoral,
Tabla 5. Clasificación CEAP
12. 12
flebografía, varicografía, medida de presión venosa, TC venosa, RM venosa, o
ultrasonidos intravascular -IVUS-) puede ser necesario en ciertos casos.
Estadio C3 con edema sin trastornos cutáneos: se utiliza el nivel II de diagnóstico
para determinar la severidad de reflujo o si existe obliteración de sistema
profundo responsable del edema. Si se sospecha o demuestra obliteración como
resultado del eco-Doppler, puede considerarse utilizar los exámenes del nivel III.
Estadios C4, C5, C6: los trastornos cutáneos sugieren enfermedad venosa
incluyendo úlcera curada o abierta con o sin edema o venas varicosas. El nivel II
es requerido en prácticamente todos los pacientes. En casos seleccionados como
aquellos en los que debe considerarse una intervención en sistema profundo,
están indicados los exámenes del nivel III.
Para algunos autores, una buena anamnesis y exploración física son suficientes para el
diagnóstico de la IVC (grado de recomendación C), sobre todo en Atención Primaria (AP);
sin embargo, para otros es necesario completarlo con pruebas de función
hemodinámica12.
1. Anamnesis: investigar sobre sintomatología, evolución, antecedentes familiares y
personales, y sobre factores de riesgo. Nos puede orientar sobre la etiología y la
fisiopatología de la enfermedad.
2. Exploración física (grado de recomendación C): con el paciente en bipedestación, se
deben explorar ambas piernas de forma completa. La inspección y la palpación nos
confirman la existencia de varices, edema, cambios tróficos y la presencia o ausencia de
pulsos. Es necesario para la clasificación C de la CEAP y muy útil para realizar el
diagnóstico diferencial. Existen maniobras exploratorias, como la de Perthes, la de
Trendelenburg o la de Schwartz, que nos orientan sobre la localización del sistema
venoso incompetente, pero que son de escaso uso en la actualidad, sobre todo desde la
utilización del eco-Doppler2,13,14.
3. Eco-Doppler (grado de recomendación B;enlospacientescandidatos a cirugía el grado
de recomendación es A): es la prueba de referencia para el diagnóstico de la IVC. Aporta
datos hemodinámicos y de localización en tiempo real, y ha desplazado totalmente a la
flebografía y a la pletismografía, que solo se usan de forma ocasional en el caso de no
disponer de eco-Doppler o en el contexto de ensayos clínicos5,13.
– Índice tobillo-brazo: no diagnostica insuficiencia venosa sino arterial. Se recomienda
calcularlo porque si es menor de 0,9, las medidas compresivas están contraindicadas5.
El diagnóstico diferencial12 se encuentra en la tabla 6.
13. 13
TRATAMIENTO NO QUIRÚRGICO DE LA EVC
El tratamiento de la EVC pasa por el abordaje de los factores de riesgo, la terapia
compresiva, el tratamiento farmacológico, la escleroterapia y la cirugía, según el estadio
evolutivo de la enfermedad.
ABORDAJE DE LOS FACTORES DE RIESGO
Se trata de actuar sobre aquellos factores modificables relacionados con la aparición de
la enfermedad para retrasar la progresión de la EVC y mejorar su sintomatología.
Recomendamos informar y aconsejar a todos los pacientes:
Evitar el sedentarismo. Realizar actividad física regular: pasear al menos durante
45 minutos al día, natación, bicicleta fija... }
Realizar ejercicios que mejoran el retorno venoso en los sujetos con EVC (Grado
2C) Evitar las prendas ajustadas que causen fenómenos de obstrucción del flujo
venoso (calcetines y ligas apretadas, ropa demasiado ajustada, etc.). }
Evitar el estreñimiento, por el aumento de presión abdominal que produce con el
consecuente obstáculo para el retorno venoso.
Adaptar el calzado a la bóveda plantar y respetar la dinámica normal del pie,
asegurando un buen funcionamiento de la bomba muscular.
Corregir toda alteración de la estática y dinámica de la extremidad inferior. Evitar
el uso continuado de tacones de más de 3 cm de altura.
Evitar exposiciones prolongadasal calor en laspiernas (saunas,sol, depilación con
cera caliente o utilización de agua demasiado caliente).
Las duchas frías ayudan a reducir el volumen del pie, del perímetro del tobillo y
de los síntomas subjetivos, debiendo realizarse con recorrido ascendente (de
tobillo a ingle) por la cara interna de la extremidad.
Evitar los hábitos tóxicos (tabaco, alcohol, drogas) y seguir una dieta saludable
que consiga un peso ideal.
Medidas físico - posturales
o Evitar la bipedestación y sedestación prolongadas.
o Reposar con los pies elevados, durante 30 minutos, tres o cuatro veces al
día.Se complementa con la realizacióndel descansonocturno en la misma
posición, estableciendo una diferencia de altura entre los pies y la cabeza
de unos 15 cm. Cuando las varices sean unilaterales, se recomienda el
Tabla 6
14. 14
descanso nocturno sobre el lado sano. (siempre que no esté
contraindicado por otras patologías)
o Otras medidas útiles serian los masajes de abajo a arriba y la hidroterapia
que favorece el tono venoso y parece tener un efecto mayor en la
reducción del edema que la elevación de extremidades.
Cuidar la piel y detectar de forma precoz las heridas.
Algunos fármacos pueden empeorar la sintomatología venosa (ingesta
prolongada de anticonceptivos y algunostratamientoscon hormonas femeninas).
TERAPIA COMPRESIVA
Es fundamental para el tratamiento de la EVC, ya que la correcta utilización de este
método ha demostrado ser el tratamiento más eficaz en IVC. Entre los efectos
demostrados se encuentran: reducción del edema, reflujo y volumen venoso; mejoría de
la bomba venosa y de la presión transcutánea de oxígeno, aumenta la velocidad venosa,
aumenta el flujo arterial, mejora de la microcirculación y aumenta el drenaje linfático,
también mejora la función valvular. Asimismo, ha demostrado capacidad para reducir
tanto la incidencia como la sintomatología de la EVC, lo que provoca un aumento de la
calidad de vida del paciente. Está contraindicada de forma absoluta en la isquemia
arterial (índice tobillo-brazo menor a 0.9), dermatitis y artritis reumatoide en fase aguda
(Tabla 7). Estará indicada en la enfermedad venosa crónica sintomática, después de
tratamientos esclerosantes y postquirúrgicos de las varices, en la profilaxis y tratamiento
de varices en el embarazo y profesiones de riesgo, y para favorecer la curación de las
úlceras venosas.
Hay distintos tipos de compresión:
• Elástica: la más utilizada. Ejerce presión pasiva durante el reposo y activa durante el
ejercicio. Realiza una compresión decreciente desde el tobillo hasta la rodilla (tipo
calcetín), el muslo (media) o la cintura (panty). Su utilización debe ser individualizada y
adecuada a cada tipo de paciente: así la talla se debe ajustar a cada paciente para que no
haya riesgo de torniquete o por el contrario, sea ineficaz por falta de presión. En España
existen tres grados de compresión homologados: normal (22-29 mmHg), fuerte (30-39
Tabla 7
15. 15
mmHg)y muy fuerte (>40 mmHg)15.Serecomienda uno u otro en función de la gravedad
de los síntomas: a mayor grado clínico, mayor compresión: se deben utilizar medias de
compresión ligera en caso de telangiectasias, varices de pequeño tamaño o escasamente
sintomáticas, compresión moderada en caso de insuficiencia venosa sintomática,
prevención de úlceras venosas. La compresión fuerte se reserva para pacientes con
úlceras venosas o insuficiencia venosa muy sintomática y compresión muy fuerte se
recomienda en caso de linfedema. Se deben colocar en decúbito para que las venas de
los miembros inferiores tengan el menor reflujo posible. De forma arbitraria,se acepta
que sean renovadas cada 6 meses.
• Inelástica: se trata de un envoltorio rígido sobre la pierna, tipo vendaje, que ejerce
presión durante el ejercicio pero no en reposo. Se utilizan en los casos de mayor
gravedad.
• Otros sistemas, como los multicapas, que son combinaciones de los anteriores, o la
presoterapia instrumental, se utilizan menos.
Un metaanálisis concluyó que las medidas de compresión de 10 a 20 mmHg (sobre el
tobillo) mejoran los síntomas de IVC; menor presión es inefectiva y mayor no aporta
beneficios adicionales.
Efecto de las medias de compresión durante el embarazo:
- Aunque las medias de compresión no previenen la aparición de varices durante
el embarazo, pueden disminuir la incidencia de insuficiencia y mejorar la
sintomatología de la extremidad.
Efecto de las medias de compresión tras el tratamiento con escleroterapia:
- Los pacientes tratados con elastocompresión durante un periodo de entre una
y tres semanas muestran menores efectos secundarios, incluida pigmentación,
que los tratados por un menor periodo de tiempo o los no tratados.
- Los vendajes no se aconsejan después de esclerosis siempre que pueda
colocarse media elástica.
Las medias de compresión largas hasta la parte alta del muslo, no muestran mayor
beneficio en la prevención del SPT que las cortas, hasta debajo de rodilla. Sin embargo,
estas últimas son mejor toleradas.
Efecto de las medias de compresión en la curación de las úlceras venosas:
- La elastocompresión acelera la curación de las úlceras venosas comparada con
la no compresión.
Estudios recientes cuestionan algunos conceptos convencionales de la compresión
elástica:
- En el edema venoso crónico, la baja presión puede ser más efectiva que la
presión elevada.
TERAPIA FARMACOLÓGICA
Existen numerosos tratamientos farmacológicos para la IVC, sin embargo, la mayoría de
los estudios tienen una evidencia de beneficio de calidad bastante baja. Además, la
mayoría de los estudios utilizan metidos diferentes para identificar los signos y síntomas
16. 16
y la corta duración del seguimiento hacen que no se pueda asegurar la eficacia y
seguridad del uso de dichos fármacos.
Los flebotónicos conforman un grupo heterogéneo de fármacos naturales y sintéticos
que actúan sobre distintas partes de la fisiopatología de la IVC con intención de mejorar
los síntomas, pero no prevenirlos. El efecto beneficioso de este heterogéneo grupo
terapéutico sobre la micro y macrocirculación venosa, se consigue a través de distintos
mecanismos, no del todo bien conocidos ni compartidos por todos los principios activos.
Los principales son el incremento del tono venoso, la disminución de la permeabilidad
capilar, la disminución de la viscosidad sanguínea y de la agregación eritrocitaria y,
fundamentalmente, el efecto antinflamatorio sobre el endotelio vascular, a través de la
regulaciónde la producción de factoresde crecimientoendotelial,la reducción del estrés
oxidativo y la disminución de la adhesión de neutrófilos y monocitos.
Se ha sugerido la eficacia sobre algunos signos como el edema, pero su relevancia clínica
es incierta. No se detectó evidencia significativa para otros parámetros valorados como
prurito, pesadez de piernas, calambres, parestesias, dolor o cambios tróficos cutáneos.
Además, no existen pruebas a favor de la eficacia de los flebotónicos en el tratamiento
de las úlceras venosas ni que apoye la administración de estos por tiempos superiores a
3 meses. Por otro lado, los datos de seguridad de dichos medicamentos hacen referencia
a cortos períodos de tiempo, no se estima a medio-largo plazo. Por tanto, no existe
evidencia clínica que permita la recomendación de uno u otro de ellos. Es necesario
realizar más ensayos clínicos controlados y aleatorizados que tengan en mayor
consideración la calidad metodológica para afirmar su recomendación o no19.
Sin embargo,la Agencia Española del Medicamento emitióuna nota informativa,el 10 de
septiembre de 2002, en la que recomendaba limitar el uso de los venotónicos por vía oral
para el alivio a corto plazo (de 2 a 3 meses) del edema y los síntomas relacionados con la
IVC.
o Oxerutinas/rutósidos: es una mezcla de flavonoides semi-sintéticos, que
reducen el edema y los síntomas derivados de la IVC. Los estudios realizados
parecen demostrar la eficacia de este fármaco tanto como tratamiento único
como asociado a medias de compresión. Sin embargo, la mayoría de los ensayos
realizados presentaban riesgo de sesgo en favor del tratamiento por lo que se
debe ser cautelosos con los resultados obtenidos respecto a sueficacia. Se han
realizado estudios con oxerutinas donde han sido administradas en embarazadas
sin que se genere un aumento significativo de efectos adversos, muertes
perinatales, partos pretérminos o malformaciones congénitas respecto al grupo
tratado con placebo, por lo que se pueden utilizar con seguridad en aquellas
pacientes en las que las medidas físico-posturales no sean suficientes.
o Escina (castaño de Indias): se puede usar una dosis máxima de 300 mg cada 12
h en los pacientes en los que las medidas generales no son suficientes o las
medias de compresión están contraindicadas. Su mecanismo de acción es la
estimulación de producción de prostaglandinas que actúan induciendo una
venoconstricción. Un estudio demostró que su eficacia era equivalente a la de
la terapia compresiva, sin embargo, dado que los estudios en animales se
consideran insuficientes y no existendatos clínicos sobre su uso en el embarazo,
no sedebe prescribir salvoque seaclaramente necesario.Además, parece lógico
pensar que, si las prostaglandinas estimulan el trabajo de parto, existiría la
posibilidad de incrementar el riesgo de partos prematuros o abortos.
17. 17
o Fracción flavonoica purificada y micronizada: es una mezcla de diosmina y
herperidina que mejora el edema, los síntomas, los cambios en la piel y la
curación de las úlceras según un metaanálisis de cinco estudios realizados sobre
la eficacia de este fármaco. En un estudio de 50 mujeres se ha demostrado la
seguridad de su uso durante la gestación y se ha aceptado que este
medicamento no afecta al embarazo, desarrollo fetal y peso del recién nacido.
Tabla 8. Indicaciones, contraindicaciones y dosis según la AEM de los tratamientos
farmacológicos para la insuficiencia venosa en la gestación.
TERAPIA INVASIVA
Engloba tanto técnicas quirúrgicascomono quirúrgicas.Su objetivo es anular o modificar
el paso de la sangre por los vasos mal funcionantes para reducir la hipertensión venosa
existente en el sistema venoso superficial. Se pueden considerar varias técnicas:
o Escleroterapia (grado de recomendación B): consiste en la inyección intravenosa
de una sustancia irritante que provoca una respuesta inflamatoria en el endotelio
de la vena para su posterior trombosis y fibrosis. El producto más utilizado en
España es el polidocanol y la espuma de polidocanol. Sus resultados mejoran si se
hace ecodirigida. Está indicada en las varículas y telangiectasias.
o Ablación intravenosa (grado de recomendación C), ya sea por láser (EVLA),
radiofrecuencia, o vapor de agua (lo más novedoso, aunque con poca experiencia
de uso): los resultados iniciales son tan buenos como los de la cirugía
convencional, pero faltan datos a largo plazo.
o Cirugía de resección venosa: fleboextracción parcial o completa de la vena safena
interna asociada a la ligadura de las venas perforantes incompetentes (grado de
recomendación A). Es el tratamiento de elección en pacientes muy sintomáticos
y con varices evidentes, y en aquellos con riesgo de complicaciones (varicorragia,
cambios tróficos, úlcera venosa).
o Cura CHIVA(conservadora hemodinámica dela insuficiencia venosa ambulatoria):
pretende tratar las venas disfuncionantes mediante el mínimo gesto quirúrgico a
partir de un estudio hemodinámico (eco-Doppler) completo para conservar al
máximo el sistema venoso.
Los resultados iniciales de todas las técnicas quirúrgicas son similares, pero faltan datos
a largo plazo. No existe evidencia científica para recomendar uno u otro, pero debe
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tenerse en cuenta la mejor tolerancia del paciente en las técnicas mínimamente
invasivas.
Deben ser considerados para cirugía aquellos pacientes que, tras un estudio
hemodinámico básico, presenten: varices con sintomatología de IVC, con afección de
safenas y/o perforantes; varices poco sintomáticas pero muy evidentes con riesgo
potencial de complicaciones (varicoflebitis, varicorragia), y varices recidivadas13,14. El
índice de recidiva, entendido como la aparición de nuevas venas varicosas, oscila entre
el 6 y el 20%, dependiendo de la técnica aplicada, aunque no se dispone de evidencia
científica quepermita cuantificar conprecisión.Por tanto, se trata de una técnica efectiva
pero no definitiva, por lo que pueden ser necesarias intervenciones complementarias a
lo largo del tiempo.
¿CUÁNDO DERIVAR A CIRUGÍA VASCULAR?
o Pacientes con sintomatología persistente que no respondan a las medidas
conservadoras.
o Pacientes con IVC complicada: tromboflebitis superficial de repetición, trombosis
venosa profunda, varicorragia, úlceras venosas y síndrome posflebítico.
o Pacientes candidatos a intervención quirúrgica.
Tabla 9
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PUNTOS CLAVE
o La insuficiencia venosa crónica (IVC) es una enfermedad muy prevalente en
nuestro medio aunque debido a la falta de estudios rigurosos no se conocen las
cifras concretas.
o La etiología en la mayoría de los casos (95-97%) es primaria o idiopática.
o La sintomatología es muy variada e inespecífica: pesadez de piernas, varículas,
hinchazón, dolor, varices, calambres, parestesias y úlcera venosa.
o La clínica empeora con la bipedestación y en ambiente caluroso, y mejora con el
decúbito, el frío y el ejercicio físico.
o No existe correlación entre la afectación hemodinámica y la intensidad de los
síntomas.
o La clasificación más utilizada es la CEAP, que integra datos clínicos, etiológicos,
anatómicos y fisiopatológicos.
o Una buena anamnesis y la exploración física en bipedestación son
imprescindibles.
o El eco-Doppler es la prueba complementaria de elección.
o La terapia compresiva es la medida fundamental para el tratamiento. También se
deben recomendar medidas generales que faciliten el retorno venoso.
o No hay estudios que demuestren la eficacia de los flebotónicos en la mejoría de
los síntomas de IVC, salvo en el edema.
o En pacientes muy sintomáticos con varices evidentes y en aquellos con riesgo de
complicaciones se recomienda tratamiento quirúrgico.
o No existe evidencia científica para recomendar un tipo de cirugía u otra, pero es
mejor la tolerancia a las técnicas mínimamente invasivas.
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BIBLIOGRAFÍA
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Octubre.
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