El documento habla sobre el manejo de las adicciones en el primer nivel de atención. Resalta que el abordaje debe ser multidisciplinario e incluir las fases de recuperación, rehabilitación y reinserción social. También enfatiza la importancia de la coordinación entre los diferentes niveles del sistema de salud y los recursos comunitarios, así como la necesidad de basarse en la evidencia científica para la toma de decisiones.