3. HISTORIA
+ El virus toma su nombre de la ciudad alemana de Marburgo, donde
fue aislado en 1967 tras una epidemia de
fiebre hemorrágica que cundió en el personal de laboratorio
encargado de cultivos celulares que había trabajado con riñones de
simios verdes ugandeses (Cercopithecus aethiops) importados hacía
poco, que luego resultaron estar infectados.
+ En total enfermaron 37 personas. 25 casos ocurrieron entre el
personal del laboratorio, por contacto directo con los monos. Siete de
estos murieron. Los otros casos comprendieron dos médicos
(infectados al pincharse accidentalmente con las jeringuillas que
utilizaron para extraer sangre a miembros enfermos del personal del
laboratorio), una enfermera, un ayudante de autopsias y la esposa de
un médico veterinario. En todos estos casos el contagio se produjo
por contacto directo con una persona infectada.
4. OTROS CASOS
+ En 1975, fue hospitalizado en Johannesburgo, Sudáfrica, un varón australiano de 20 años
+ El 8 de enero de 1980, enfermó en Kenia, Charles Monet, un francés de 56 años
+ El 13 de agosto de 1987, fue hospitalizado, asimismo en Kenia, un muchacho danés de 15 años
+ Entre 1998 y 2000 hubo una epidemia en la República Democrática del Congo, con 154 personas
enfermas de las que murieron 128 (mortalidad del 83 %). La mayor parte de los casos ocurrió entre
obreros de la mina de oro de Durba
+ Entre 2004-2005 se dio en Angola el que acabaría siendo el mayor brote de fiebre hemorrágica de
Marburgo de la historia. Se originó en la provincia de Uige en octubre de 2004. Tras identificarse
el último caso confirmado en laboratorio, en julio de 2005, el Ministerio de Salud había notificado en
total 374 casos, incluidas 329 defunciones
+ Entre junio y agosto de 2007 se confirmaron en Uganda tres casos entre mineros de Kamwenge, en
el oeste del país.
+ En julio de 2008, una turista holandesa desarrolló la enfermedad cuatro días después de volver a
los Países Bajos tras tres semanas de vacaciones en Uganda.
5. ¿QUÉ ES?
+ Se cree que la fiebre de Marburgo puede ser una zoonosis, pero por el momento todavía no ha
sido identificado el depósito del virus, a pesar de que se han tomado en consideración muchas
especies animales. Se cree que el virus de Marburgo puede ser endémico en muchas áreas
del África Central. Se discute todavía la cuestión de si los filovirus pueden ser responsables de
infecciones subclínicas.
+ Todos los grupos de edad son susceptibles de una infección, pero se cree que los más
predispuestos son los adultos. Cabe notar, de todos modos, que antes se creía que los niños
estaban poco expuestos (8% en la República Democrática del Congo), pero en la epidemia en
Angola también ellos resultaron afectados.
6. ESTRUCTURA DEL VIRUS
+ El virus de Marburgo presenta la estructura clásica de los filovirus. El virión presenta
una morfología irregular (pleomórfica), pues tiene forma de bastoncillo de longitud variable entre
los 800 y los 1400 nm y con un diámetro de alrededor de 80 nm. En ocasiones pueden también
tener forma circular, de U o de 6.
+ La nucleocápside presenta, en su interior, una molécula de ARN de polaridad negativa, y la
envoltura viral tiene una simetría helicoidal. El todo está cubierto por una envoltura lipídica que
proviene de la membrana de la célula hospedadora, de la cual salen proyecciones (peplómeros) de
alrededor de 7 nm entre las que media un espacio de 10 nm. Dichas proyecciones tienen forma
globular y están formadas de homotrímeros de la glicoproteína de superficie.
+ El genoma del virus es de alrededor de 19 Kb y parece contener el código de 7 productos; el
genoma presenta una disposición lineal de los genes con una zona de superposición.
7. DIAGNÓSTICO Y TERAPIA
+ El diagnóstico se basa esencialmente en el decurso clínico y en los datos epidemiológicos.
Un diagnóstico específico se basa en el aislamiento del virus o bien en la evidencia de la
respuesta inmunitaria y en la presencia de material genómico viral.
+ No existe terapia específica. Aunque en la actualidad no existen vacunas o terapias contra los
virus del Ébola o Marburgo aprobadas para uso humano, algunos investigadores han
conseguido desarrollar vacunas contra ambos patógenos basadas en una forma recombinante
del virus de la estomatitis vesicular que produce los virus del Ébola y Marburgo en la superficie
de la proteína, y descubrieron que una sola inyección de cualquiera de ambas vacunas en
macacos producía respuestas inmunes protectoras cuando el virus correspondiente se
introdujo en estos animales.