1. LA CREACIÓN DE EMPRESAS Y EL DESARROLLO
(Caso: Colombia)
LA ESTRATEGIA EMPRESARIAL
DE LA TEORÍA ALA PRÁCTICA
A propósito del texto: La mente del estratega1 (El mundo de los japoneses en el mundo de los
negocios). Primera parte (El arte del pensamiento estratégico, sección I (Análisis: el punto de
partida).2
Introducción
La administración de empresas supone la construcción de opciones que permitan la implementación
de acciones, en la perspectiva del desarrollo y crecimiento. En este sentido puede ser asociada al
concepto de gestión; pero lo trasciende. Porque, la administración, construye y aplica posiciones
que, a su vez, permiten establecer contenidos para la misión. Siendo así, entonces, debe estar
soportada tanto en el análisis del conocimiento y experiencias acumuladas; como también en el
diseño de teoría y prácticas específicas; en contextos económicos y sociales concretos. Esto es lo
que explica, a manera de ejemplo, un tipo de relación condicional con respecto a variables
derivadas de la política económica. Entre otras cosas, porque el diseño de planes y programas para
la intervención en los mercados; supone la presencia de agentes exógenos vinculados con las
decisiones institucionales. Tanto es así, que no puede concebirse la administración de negocios,
haciendo abstracción de los objetivos macroeconómicos propuestos para periodos concretos, por
parte de instituciones gubernamentales a nombre del Estado.
En consideración a este hecho el análisis propuesto, a pesar de tener como referente un texto en
el que se expresan conceptos y se sugieren alternativas en relación con la estrategia empresarial,
está orientado dilucidar aspectos clave de la administración y sus instrumentos colaterales;
precisamente en nexo con la noción de estrategia y el rol asumido por parte de quien y/o quienes
ejercen como gestores de las estrategias empresariales.
Considero pertinente, en el contexto expresado antes, citar una expresión de la profesora Consuelo
Corredor: “..Durante la administración de Julio César Turbay Ayala (1978-1982), la condiciones
económicas y políticas del país entran en un franco deterioro como resultado de los límites
impuestos por el modelo liberal de desarrollo. Sin embargo, no fue menos importante la
contribución de la politica gubernamental en la aceleración de la crisis. En materia económica se
mantiene la desregulación económica del periodo anterior y se compromete al país con un
creciente endeudamiento externo. Los crecientes conflictos sociales derivados de problemas
políticos se enfrentan abiertamente con estrategias militares.
Con relación a la propuesta económica gubernamental, ésta se sintetizó en el Plan de Integración
Nacional – PIN- . Como su nombre lo indica, la preocupación central del plan de desarrollo estuvo
1Ohmae, Kenichi. La mente del estratega,Editorial Mc Graw Hill, edición revisada. Traducido de primera
edición en inglés (The mind of the strategist:The arto f jamanase-Business, ISBN 84-7615-600-6, 1999.
2Ibíd., páginas 9-37
2. en proporcionar una mayor infraestructura en transportes y comunicaciones, para solucionar los
problemas de la precaria integración económica de las distintas regiones al mercado nacional.
Igualmente, se privilegió el desarrollo del sector energético y minero, por contar con ventajas
comparativas en este campo, para lograr en un futuro liberar divisas, ahora comprometidas en la
importación de hidrocarburos. También se aspiraba a generar divisas mediante la exportación de
productos mineros y de servicios energéticos, en una perspectiva de mediano plazo, dada la
duración de los proyectos para iniciar la producción…”3
La línea d análisis desarrollada, en el presente trabajo, supone el seguimiento de los conceptos
básicos vertidos por Kenichi Ohmae en el texto de la referencia. A partir de este seguimiento,
asumo algunas posiciones soportadas en la caracterización a y la visión que he logrado construir; a
partir de otras lecturas y del curso mismo de la materia, en el contexto del programa curricular.
A manera de ilustración, presento algunos insumos conceptuales, derivados del análisis de la
interpretación propuesta por Ohmae en lo que hace referencia al entendido del análisis de un
proceso hipotético y el rol que le corresponde al estratega. Veamos:
“El análisis es el punto crucial de arranque del pensamiento estratégico. Al enfrentarse a
problemas, tendencias y acontecimientos o situaciones que parecen constituir un todo armónico o
que, de acuerdo con el sentido común actual, parecen venir integradas como un todo, el pensador
estratégico los divide en sus partes constitutivas. Luego, tras descubrir el significado de estos
componentes, los vuelve a ensamblar para maximizar sus ventajas.
En los negocios, como en el campo de batalla, el objetivo de una estrategia consiste en
aproximarse a las condiciones más favorables a nuestro bando, juzgando con precisión el momento
oportuno para atacar o retirarse, y evaluando siempre con corrección los límites del
compromiso...”4
El concepto de intervención del estratega, en Ohmae, mantiene una constante: un soporte teórico
asociado a la voluntad y a la capacidad derivada de la intuición. Inclusive, como se puede observar
en el caso analizado en relación con el paquete turístico (pagina 9) ofrecido por una compañía; el
entendido del factor costo beneficio, no es otra cosa que una simple reflexión originada en el
método comparativo; a partir de cruzar la información personal-vivencial, con el valor ofertado. Es
relevante esta anotación, por cuanto constituye (en m opinión) el hilo conductor de su propuesta
global. En la parte del texto citado por mí, puede observarse esa misma tendencia; en tanto
reclama y posiciona una estructura lineal para el análisis. La partición de del todo complejo, y la
posterior articulación; es presentada como si se tratara de variables homogéneas en su
comportamiento. Más aún, en la misma página presenta una versión del mismo problema;
asumiendo una opción un tanto híbrida; en donde una dicotomía hipotética, adquiere valor para
reiterar en su método. Veamos:
“..Por eso, el verdadero pensamiento estratégico contrasta fuertemente con el enfoque
convencional de los sistemas mecánicos que se basa en el pensamiento lineal. Pero también
contrasta con el enfoque que todo lo basa en la intuición y llega a conclusiones sin ningún desglose
o análisis...”5
Entonces, para Ohmae, el asunto vinculado al método en la teoría del conocimiento, no es otra
cosa que la partición del todo complejo, de tal manera que se facilite el análisis para el estratega.
3Corredor M., Consuelo, Los límites de la modernización, segunda edición 1997, edición Cinep-Facultad de
Ciencias Económicas Universidad Nacional de Colombia, páginas 238-239.
4Ohmae, Kenichi, obra citada, página 10
5Ibíd., página 10
3. Insisto que, aquí, se desconoce el rol de las variables dinámicas que deben ser tenidas en cuentas
al momento de la proyección de una determinada oferta y/o opción.
En lo que sigue profundizaré acerca de esta confrontación.
1. Presentación:
Desde el punto de vista la teoría del crecimiento económico, el hecho de proponer una
determinada estrategia para estimular el desarrollo, supone una delimitación conceptual en
términos del significado que adquiere la relación entre la ampliación de la base productiva y la
redistribución del ingreso.
Con esta visión, como postulado básico, el presente trabajo pretende establecer algunas líneas de
interpretación en lo que respecta a la opción vinculada con la creación de empresas como soporte
del crecimiento económico y como aporte fundamental para el desarrollo de un país.
Es obvio, asimismo, que no puede proponerse una interpretación en esa perspectiva, haciendo
abstracción de las características específicas en que este se desenvuelve, visto el contexto
económico, político y social a nivel internacional. Esto es así, fundamentalmente, visto el caso de la
división existente entre países con desarrollo pleno y con un acumulado de riqueza y tecnología y
aquellos países (como el nuestro, por ejemplo) en los cuales el desarrollo ha sido lento, traumático,
no consolidado y con retraso en la base tecnológica.
Por lo tanto, en mi escrito, propongo un análisis de las condiciones en las cuales se produce la
creación de empresas en Colombia y su nexo con la politica macroeconómica implementada desde
el gobierno central, por la vía de las medidas estrictamente monetarias; así como también en lo
que respecta al Plan Nacional de Desarrollo vigente. Particularmente, haré énfasis en la última
norma que ejerce como directriz para el entendido que el actual gobierno tiene acerca de la
relación creación de empresas, desarrollo y crecimiento económico (Ley 1014 de 2006).
2. Marco teórico y conceptual.
2.1 El crecimiento y la teoría económica.
Ha existido, en el proceso inherente al desarrollo de la teoría económica, diferentes momentos en
la confrontación entre opciones conceptuales y prácticas divergentes. Desde la propuesta originaria
de la visión moderna para el desarrollo capitalista, centrada en la teorías acerca del proceso de
reproducción diseñadas, a manera de ejemplo, por Quesnay (“ Tabla económica”); Adam Smith
(“Naturaleza y causas de la riqueza de las naciones”) y Sismondi (“Nuevos principios de la
economía politica o la riqueza en relación con la población”); hasta las opciones teóricas que
cuestionan esas interpretaciones diseñadas por Kart Marx (“El Capital”), Rosa Luxemburgo (La
Acumulación del Capital”). Contando, inclusive, en este espectro, a Jhon Maynard Keynes
(“Tratado general sobre el empleo, el interés y el dinero”).
Esto supone, en consecuencia, la necesidad de trabajar con una posición de cobertura lo
suficientemente amplia; de tal manera que no se desemboque en un discernimiento anclado en un
entendido lineal y/o dogmático. Ante todo, porque en esto de analizar el significado de la creación
de empresas y su relación con el entorno económico y social, no admite opciones tangenciales que
eludan el hecho objetivo, en cuanto a la existencia de una conexión dialéctica (...o, si se quiere,
4. conflictual) entre la implementación y desarrollo de la empresa, con respecto al espectro social,
económico y político en la cual esta se desenvuelve. Ante todo porque esta, la empresa y sus
propiciadores o garantes, no puede ser entendida como una opción y/o propuesta única (en lo que
tiene de ejercicio individual); sino como partícipe de una sumatoria o globalidad económica,
inmersa, por esto mismo en la dinámica propia del crecimiento económico; conforme a unos
postulados concretos derivados de la politica macroeconómica gubernamental y de la creación de
riqueza, en el contexto de la planificación y estrategias de un Estado concreto.
Conviene, en este punto, con las reservas obvias; en tanto que constituye una visión propuesta por
una persona que contribuyó a construir una opción en contravía de la ortodoxia clásica de la
economía politica capitalista; citar una expresión de Rosa Luxemburgo en su obra “La acumulación
del capital”.
“..Hasta ahora hemos considerado la reproducción desde el punto de vista del capitalista individual
típico, representante y agente de la reproducción que se realiza por una serie de empresas
privadas. Este modo de enfocar el problema nos ha hecho ver ya bastantes dificultades. Sin
embargo, ellas son pocas comparadas con las que aparecen inmediatamente que pasamos de la
consideración del capitalista individual a la de la totalidad de los capitalistas.,
Ya una ojeada superficial muestra que la reproducción capitalista como todo social, no puede ser
concebida mecánica y simplemente como suma de las diversas reproducciones capitalistas
privadas. Hemos visto, por ejemplo, que uno de los supuestos fundamentales de reproducción
ampliada del capitalista individual es una ampliación correspondiente de su posibilidad de venta en
el mercado. Ahora bien, el capitalista individual puede lograr esta ampliación no por extensión
absoluta de los límites del mercado en general sino por concurrencia, a costa de otros capitalistas
individuales….”6
Con esto quiero enfatizar acerca de mi análisis y de su soporte, en lo que hace alusión al enfoque
teórico. Es algo así como proponer, de mi parte, un entendido en el cual el concepto y la práctica
de creación de empresa, no pueden ser presentados por fuera del contexto político, económico y
social. Esto traduce que, en mi concepto, sobre las expectativas derivadas de la creación y
desarrollo de las empresas, ejerce una influencia determinante la politica macroeconómica
gubernamental y las estrategias de crecimiento formuladas en un plan de desarrollo específico,
para uno o varios periodos igualmente específicos y concretos.
Inclusive, en la visión propuesta por mí, se incluye, necesariamente, una interpretación del
significado que tiene la planificación económica; como opción estatal. Algo que ya fue planteado
por Keynes (para el caso de la economía capitalista); como alternativa de solución para la crisis
originada en la recesión global iniciada en 1930. De otra parte, por lo mismo que he venido
planteando, en términos de la interacción entre los diferentes agentes del proceso económico
internacional y nacional; cabe establecer un referente en lo que respecta a la situación de los
países que no han acumulado riqueza, ni tecnología suficiente como para considerarse de
desarrollo pleno (esto ya lo expresé en el numeral 1).
Quiero presentar, como ayuda conceptual, una reflexión del profesor P.T. Bauer en su obra “Crítica
de la teoría del desarrollo”. Como en la anterior cita, hago aquí la aclaración en el sentido de la
reserva que pueda acompañar la reflexión aludida. Veamos:
“…La planificación global implica, además, que gran parte de la producción no está relacionada con
la demanda del consumidor y por tanto con los niveles de vida. De ahí que , aun en el caso de que
6 Luxemburgo, Rosa. “La acumulación del capital. Editorial Grijalbo, primera edición 1967, de la traducción
española,página 27
5. la politica fuese de incremento de la producción total en relación con lo que hubiera sido en otro
caso, lo cual es improbable, este incremento no estaría relacionado con los niveles de vida, cuya
mejora es el objetivo ostensible de la politica. Este divorcio entre producción y niveles de vida es
probable que en si mismo retrase el alza tanto de la producción como de los niveles de vida;
porque la perspectiva de un nivel de consumo más alto y variado generalmente es un incentivo
importante para una mayor actividad económica a través de un esfuerzo, ahorro e iniciativa
individuales. Esto resulta especialmente cierto en países pobres...”.7
2. 2 Una visión particular del concepto de planificación e incentivos.
A manera de corolario transitorio, considero pertinente resaltar dos aspectos en lo que respecta al
enfoque propuesto por mí:
-La creación de empresas, considerada como una opción para la actividad económica, en el
contexto de una economía de mercado; supone la fijación de unos objetivos concretos por parte de
quien o quienes se comprometen con ese ejercicio. Por lo mismo que esta actividad se considera
inmersa en la dinámica propia de la economía capitalista y del mercado que ejerce como elemento
colateral a la producción de bienes y servicios; debe suponer la existencia de factores endógenos y
exógenos que actúan como referente al momento de planear y hacer efectiva la participación en el
mercado. Uno de esos factores lo constituye la politica macroeconómica concreta implementada por
el gobierno, para un periodo específico. El otro tiene que ver con la interacción necesaria entre la
condición en que se encuentra el país con respecto a la economía mundial global; asociada esta
condición con otro aspecto que relaciona a la producción y al consumo; como elementos que se
condicionan y que está, a su vez, relacionados con el nivel de vida y sus perspectivas.
- La planificación específica asociada a las estrategias de desarrollo planteado para el país concreto,
define unas determinadas prioridades y, por esto mismo, unas determinadas condiciones en las
cuales se realiza la actividad económica productiva. Esto incluye, entre otras cosas, la definición y
concreción de los incentivos para los productores y las áreas concretas a las cuales estos se dirigen.
A manera de ejemplo: para el caso colombiano, el Plan Nacional de Desarrollo aprobado por el
legislativo, para el período 2005-2007, define unas prioridades para el sector productivo, de
conformidad con la visión gubernamental en lo que respecta a la economía de mercado y su
aplicación en este tiempo en el cual transcurre una etapa precisa de la globalización económica, por
la vía de actividades multilaterales y bilaterales. Este es el caso concreto de los énfasis en
relacionar el crecimiento económico con la opción de los tratados de libre comercio internacional;
bien sea entre nuestro país y Estados Unidos de Norteamérica o entre nuestro país y otros países
de la región, particularmente de la Zona Andina y Centroamericana.
-Los incentivos gubernamentales específicos, se pueden presentar por diferentes vías. Una de ellas,
a manera de ejemplo, tiene que ver con exenciones tributarias (ver propuesta de reforma
tributaria) o con la flexibilización de la normatividad vigente en lo que respecta a requisitos para la
creación de empresas y para su desarrollo. Esto último, a su vez, incluye incentivos relacionados
con la flexibilización laboral (este el caso, a manera de ejemplo de las sucesivas modificaciones a la
legislación laboral, a partir de 1990 con la Ley 50 y la Ley...)
3. De la casuística. Concepto de desarrollo y consolidación.
3.1 Colombia a partir de 1990.
7 Bauer, P.T. “Crítica de la teoría del desarrollo”. Editorial Orbis, colección Biblioteca de Economía, sin datos
del número de edición y fecha, página 104.
6. Durante el periodo presidencial 1990-1994, el ejecutivo, con el apoyo del legislativo; implementó
una visión de crecimiento económico, desarrollo y economía de mercado. Para entender, al menos
en parte, la lógica que soportó a las aplicaciones derivadas de esa visión; se hace necesario
retrotraer algunos aspectos básicos de la teoría económica definida como de apertura económica.
Esta teoría estuvo centrada en una interpretación que proclama la flexibilización de las normas
internas de cada país (ante todo las de aquellos definidos como subdesarrollados o periféricos) en
lo que respecta a la protección de su frontera económica. Incluida, obviamente, su producción
interna de bienes y servicios. Al mismo tiempo, suponía una flexibilización absoluta de la
intervención estatal en asuntos relacionados con la politica social de redistribución del ingreso;
incluida la intervención estatal en aquellas áreas relacionadas con los servicios públicos esenciales.
Por esa vía, el gobierno del doctor César Gaviria Trujillo, presentó proyectos de ley en la
perspectiva de modificar la normatividad vigente en cuanto a los términos de intercambio de
mercancías en el mercado internacional y, en paralelo, promovió y aplicó decisiones expeditas (por
la vía de decretos directos y/o reglamentarios) con las cuales incursionó en diferentes entidades
públicas, modificando su razón de ser en lo que estas tenían de instrumento para la politica de
asistencia social y de subsidios para la adquisición de servicios por parte de la población
desprotegida y hacia la cual debería estar dirigida la acción estatal, conforme a lo establecido en la
Constitución de 1991.
Todo lo anterior no puede decirse, en estricto, que se inauguró durante el gobierno del doctor
César Gaviria Trujillo. Es el resultado de un acumulado construido desde tiempo atrás y que ha
cruzado el quehacer de nuestro país en periodos consecutivos.
Veamos esto, para mayor precisión, en palabras de la profesora Consuelo Corredor, en su obra “Los
límites de la modernización”.
“…La consolidación del modelo liberal de desarrollo y del régimen político bipartidista, como su
sustento, han sido los pilares centrales sobre los cuales se ha construido el proceso de
modernización económica y, a la vez, los principales obstáculos para la configuración de una
sociedad moderna.
Las aceleradas transformaciones en el orden económico, han tenido como guía la confianza en el
mercado, como asignador de recursos y de bienes, con el resultado de la exclusión de amplios
sectores de la población del beneficio de las mismas. Ello ha sido posible por la estrategia
desarrollista, por el sistema de dominación impuesto por el bipartidismo y por la precaria
organización estatal resultante de este modelo.
La ideología liberal que se ha invocado sin restricción en el mundo económico ha sido fuertemente
restringida en el mundo político. Los principios de soberanía e igualdad de derechos y de
oportunidades, han hecho parte del discurso de la élites dominantes pero, su ejercicio práctico se lo
han reservado para ellas.
Una de las graves consecuencias de esta estrategia de modernización desde arriba ha sido impedir
la diferenciación entre lo público y lo privado. Más exactamente, la exclusión politica, social y
económica de que han sido objeto amplios sectores de la población, como resultado de la
prevalencia de los interese particulares de la élites dominantes, ha formado una confusa idea de lo
público, reducida a una mera instancia de legitimación formal del orden vigente, y de rapiña real en
busca de interese particulares y partidistas...” 8
8 Corredor M., Consuelo. “Los límites de la modernización”. Editado por Cinep-Facultad de Ciencias
Económicas de la Universidad Nacional de Colombia.- Sede Bogotá. Segunda edición, 1997. Páginas 86-87
7. Las determinaciones asumidas desde el gobierno central y las normas introducidas, en términos del
intercambio de mercancías nivel internacional y que vulneraron la intervención estatal como
regulador en la economía de mercado tuvo, para el caso que me ocupa, una incidencia
profundamente negativa hacia la empresa privada a nivel nacional. Ante todo hacia aquellas
empresas no vinculadas con transnacionales y que se vieron sometidas a un tipo de competencia
onerosa….ruinosa. Aquí, en esta expresión, cabe insistir en las afirmaciones presentadas e por mí
en el numeral 2.2; en el sentido de que la creación de empresa y su consolidación, no puede
analizarse en abstracción de circunstancias vinculadas con la intervención gubernamental y con la
presencia e incidencia de factores endógenos y exógenos. Es relevante insistir en que el
crecimiento económico, tiene que se cotejado y analizado conforme a unos determinados
referentes precisos. No solo circunstanciales y/o transitorios; sino fundamentalmente, en la
dinámica y la perspectiva económica originada en las estrategias de desarrollo y crecimiento que
tiene, entre otras herramientas para su aplicación la politica macroeconómica y los planes de
desarrollo.
3.2 El concepto de desarrollo y crecimiento en el gobierno actual.
El presidente Álvaro Uribe Vélez, ha sido uno de los más connotados defensores de la politica de
libre mercado y de la no intervención estatal. Ya, cuando ejerció como Senador de la República,
propuso los proyectos que se constituyeron en las Leyes 50 de 1990 y 100 de 1993. Ya, ejerciendo
como presidente, ha profundizado la aplicación de su noción fundamental en lo que respecta a la
teoría económica. Inclusive, no es temeraria la afirmación en el sentido de que la noción de
Colombia como Estado Social de Derecho, presente en el texto Constitucional de 1991, ha sido para
el doctor Uribe un elemento de dificultad para la aplicación plena de sus postulados en relación a
politica económica. Puede decirse asimismo que su opción básica coincide con lo propuesto por el
presidente César Gaviria Trujillo en 1990. Esto es: la apertura de las fronteras económicas al
mercado internacional, debe incluir una disminución y/o flexibilización de la intervención estatal
como instrumento regulador y garante de la producción a la industria nacional. Por esta vía de
interpretación, se entiende el diseño de su estrategia en lo que tiene que ver con los tratados de
libre comercio. Podría decirse, sin efectuar una interpretación sesgada, que su estrategia es una
versión actualizada de la politica de apertura económica del doctor César Gaviria Trujillo.
Lo cierto es que esa visión conceptual y práctica de la intervención libre de las leyes del mercado,
entra en contradicción con los postulados básicos de Estado Social de Derecho consagrados en la
Constitución Política. Pero no sólo eso, entra también en contradicción con la definición de la
intervención estatal y gubernamental en la promoción, desarrollo y consolidación de la industria
nacional, Entendida en esta noción de industria nacional, un e espectro en el cual caben la noción
de empresa relacionada con las producción diferenciada de bienes y servicios, incluidos los
agropecuarios.
Ya de por sí, al analizar la lógica que soporta al Plan Nacional de Desarrollo, se infiere una
tendencia en la cual la interacción entre internacionalización por la vía del libre mercado y el
crecimiento económico con arreglo a la creación y fortalecimiento de la industria nacional (con la
connotación amplia ya explicada) es una especie de dicotomía no reconocida, pero existente. Con
mayor razón se infiere esto, si lo analizamos en el contexto de la dinámica relacionada con los
tratados de libre comercio. Particularmente con el Tratado negociado con los Estados Unidos de
Norteamérica.
Visto así, entonces, puede afirmarse que no es sólida ni confiable la politica de creación de
empresas; si se mira en la perspectiva de la estrategia gubernamental de crecimiento económico y
de consolidación de la industria nacional.
8. Aquí, en esta última afirmación mía, es conveniente retomar lo expresado en el numeral 2.1;
cuando enfatizo en un aspecto crucial. Esto es: la dinámica del desarrollo capitalista no puede
entenderse por fuera de la lógica que lo soporta como sistema. En este tiempo de globalización,
de internacionalización e imposición de las leyes del mercado por encima de las consideraciones
particulares de un determinado Estado o gobierno; los empresarios nacionales se ven sometidos y
condicionados por las estrategias derivadas de esa lógica de mercado. Por lo mismo, en
consecuencia, no puede construirse una opción de interpretación en lo que respecta a la relación
crecimiento-desarrollo-empresa, haciendo abstracción de la dinámica que introduce esa noción de
mercado y de su lógica.
En ese mismo contexto, el solo hecho de reconocer la existencia de un alto porcentaje de la
población con niveles de precariedad que le impiden ejercer como consumidores reales y/o
potenciales de bienes y servicios, constituye una limitante para el desarrollo y consolidación de las
empresas. Con mayor razón, si se analiza de manera diferenciada, con el aspecto tamaño, monto
de capital y nivel de internacionalización como variables.
4. A manera de conclusiones.
Una vez realizado el recorrido anterior, cabe establecer una precisión necesaria. No se trata, en
este escrito, de desconocer el rol que cumple la creación de empresa en la consolidación del
modelo económico centrado en la dinámica y la lógica del capital. De lo que se trata es de
contextualizar ese rol; en términos de su relación con la política macroeconómica y las estrategias
de crecimiento económico derivadas de una determinada visión gubernamental. Por lo tanto, y así
lo he expresado de manera reiterada, el concepto de acumulación como sinónimo de desarrollo y
consolidación económicos de un país, es válido en términos de la ortodoxia asociada a la teoría
económica general. Es algo así como entenderlo en el contexto del cálculo del PIB, para periodos
sucesivos. O, lo que es colateral a lo anterior, efectuar las mediciones del crecimiento económico,
por la vía de las variables asociadas a la creación de determinadas empresas en un periodo
determinado.
Como lo propuse desde el numeral 1 (Presentación) este escrito constituye un recorrido en torno a
la noción de crecimiento económico y desarrollo en la lógica propia de un modelo capitalista.
Supone, por el mismo soporte de visión amplia y no dogmática, un aporte para la construcción de
líneas de interpretación y análisis dinámicos, no asociados a la idealización de una determinada
opción, ni a una determinada aplicación. Es, por el contrario, una tendencia a la universalización
del conocimiento en lo que esta tiene de crítica asertiva y proactiva.