El síndrome nefrótico pediátrico se caracteriza por proteinuria masiva, hipoalbuminemia e hinchazón generalizada. Se produce por daño en los glomérulos renales que aumenta la permeabilidad de los capilares, permitiendo la pérdida excesiva de proteínas en la orina. Los síntomas incluyen edemas, dislipidemias y puede complicarse con infecciones, trombosis o insuficiencia renal aguda. El tratamiento principal es con corticoides orales como la prednisona.