La cadena de valores se basa en sistemas empresariales que utilizan actividades primarias como mercadotecnia, producción, recursos humanos e investigación y desarrollo para crear valor para los clientes. Estas actividades primarias se dividen en actividades directas, indirectas y de garantía de calidad. La cadena de valores permite analizar las ventajas competitivas de una empresa al examinar cómo sus actividades internas son más eficientes que las de sus competidores.