Este documento describe los procedimientos de diagnóstico y planificación del tratamiento estéticamente orientados para la reposición de piezas dentales perdidas mediante implantes dentales. Se enfatiza la importancia de considerar múltiples elementos como el patrón de resorción ósea, el tejido gingival, los labios y las características de los dientes a reposicionar. Se describen procedimientos como el mapeo del sitio receptor, las guías quirúrgicas y radiográficas que permiten determinar la posición óptima de los impl
2. La prótesis dental soportada por implantes
dentales ha probado ser una alternativa
exitosa para la reposición de las piezas
dentales perdidas.
Originalmente la oseointegración era para
personas totalmente edéntulas pero con el
paso del tiempo también se empleó para
pérdidas dentales unitarias y edentulismo
parcial dejando el aspecto estético en
segundo plano.
Para evaluar, diagnosticar y satisfacer las
expectativas estéticas de forma predecible
se requiere de un enfoque organizado y
sistemático. El reto es restablecer una
interacción armónica de todos los
elementos que constituyen el entorno
estético.
Elementos son el patrón de resorción del
tejido óseo de soporte, el tejido gingival,
los labios, y la forma, tamaño, posición y
color de los dientes que se restituirán.
3. Patrón de resorción ósea
Cantidad y calidad de hueso= 2 fundamentales para colocar implantes
Dichas características están dadas por los patrones de resorción que
experimenta el hueso alveolar inmediatamente después de la extracción o
pérdida de las piezas dentales ya que de eso depende la posición del
implante.
El maxilar superior y mandíbula son las estructuras de soporte de los dientes.
4. Puntos de referencia del maxilar superior que ayudan a determinar la posición
previa de los dientes: canal incisivo, fosa canina, tuberosidad del maxilar.
La forma y la dimensión del proceso alveolar están relacionadas con el
tamaño y forma de las raíces preexistentes. En presencia de dientes, las
placas corticales vestibulares son delgadas y en filo de cuchillo, y las tablas
palatinas son más gruesas.
5. Mandíbula: fosa incisiva, la eminencia canina, las líneas oblicuas interna y
externa y los agujeros mentonianos.
Placas corticales delgadas en anterior y en posterior las placas corticales
tanto vestibular como lingualmente tienen un grosor similar. Patrón de
resorción poco favorable para el implante.
6. El mayor grado de resorción ocurre inmediatamente después de
las extracciones y en un lapso de 6 meses a 2 años.
La resorción de los maxilares es + en la mandíbula (4-5mm) que
en el maxilar(2-3mm).
Carlsson establece que en un plano sagital la parte anterior de
la maxila se reduce en promedio 85 mm2 durante los primeros
seis meses posteriores a la pérdida de los dientes. Entre los seis
meses y 5 años, la reducción es en promedio de 32 mm2.
Mandíbula la reducción es de 25 mm2 en los primeros 2 meses
posteriores a la extracción, a los 5 años es de 69 mm2 en el
área de la sínfisis mandibular.
Tallgreen reporta que el promedio de resorción ósea en la
maxila es de 0.8 mm en un periodo de 15 años posterior a los
primeros seis meses de la extracción de los dientes.
7. Para lograr un perfil óseo satisfactorio es necesario regenerar el
tejido en sentido labial y en sentido coronal ya que si esto no se
realiza no se puede lograr un buen soporte de tejido blando y
da origen a la desproporción en la confección de la restauración
final.
Las técnicas de regeneración ósea pueden aplicarse en conjunto
o con un abordaje diferido.
Abordaje diferido, aumento de cresta, cuando son defectos
muy grandes
La estética de los tejidos duros está determinada por la
calidad, cantidad y contornos del hueso alveolar en la zona
donde se pretende colocar los implantes, es por eso que se
deben de realizar extracciones preventivas y atraumáticas
colocando un material de relleno para conservar la topografía
ósea adecuada y después poder colocar un implante.
8. Características del
tejido gingival
Cuando las deficiencias en la
dimensión gingival ponen en
riesgo el resultado planeado, se
deben implementar
procedimientos encaminados a la
regeneración favorable del sitio
receptor y al restablecimiento del
balance estético, siendo éste,
junto con las necesidades
periimplantares, los que
determinen la secuencia del
tratamiento, ya sea que los
procedimientos necesarios para el
aumento de tejidos se hagan
antes, durante o después de la
inserción de los implantes.
9. Los tejidos interdentales, las
características morfológicas del
surco y el color y la textura de los
tejidos blandos son elementos
fundamentales en el
restablecimiento de la estética en
la relación restauración-tejido
blando.
10. El reto que se presenta con mayor frecuencia es la restitución de la papila
interdental; la ausencia de ésta ocasiona un efecto negativo en el resultado
final del tratamiento, que va desde deformidades cosméticas hasta
implicaciones funcionales tales como las dificultades fonéticas.
Debe existir una distancia menor a 5 mm del punto de contacto de los dientes
a la cresta ósea.
11. No existe evidencia clara que sustente la necesidad de contar con encía
insertada para establecer el éxito a largo plazo de los implantes dentales,
pero con base en la experiencia, los posibles beneficios incluyen el de
controlar más eficazmente la estabilidad de los tejidos, evitando posibles
recesiones que comprometan el entorno estético.
12. En conclusión, a este respecto se debe puntualizar que el protocolo
convencional debe incluir diferentes parámetros diagnósticos y quirúrgicos
encaminados a optimizar el enfoque tridimensional del perfil periimplantar,
por lo que la regeneración de tejido óseo para lograr dichos objetivos cobra
mayor relevancia. Una vez que la dimensión gingival se ha balanceado, el
resultado estético final depende de la forma y contornos de la restauración
final y la forma en que ésta emerge de los tejidos gingivales.
13. Los labios son un componente
fundamental de la sonrisa de
cualquier individuo, por lo cual
deben ser motivo de especial
atención cuando se pretende la
restauración estética de la boca.
La posición que adoptan los labios
puede ser la responsable de
realzar o demeritar el impacto
estético de la rehabilitación, por
lo tanto, de la forma en que se
combinan cada uno de los
elementos dependerá el efecto
estético y armónico de la sonrisa.
14. La relación dentogingival asociada con la forma de los dientes se toma como
referencia importante; idealmente, el margen gingival de los dientes debe
estar de acuerdo con la forma de la línea de la sonrisa de los labios24 . La
longitud y la curvatura de los labios influyen directamente en el grado de
exposición de los dientes, tanto en reposo como en función.
15. Los labios superiores e inferiores, como componentes activos de la sonrisa, se
utilizan como guía para determinar la posición de los dientes.
16. La relación de los bordes incisales con el labio inferior es un parámetro muy
valioso para determinar la posición y longitud del borde ¡nasal. La posición
que toman los bordes incisales de los dientes superiores que permiten la
pronunciación más fluida de los sonidos "f" o "v", al establecer un contacto
definido en el borde inferior del bermellón del labio inferior, determinan la
posición vestibular del tercio nasal del incisivo central superior
17. La exploración clínica para
determinar la necesidad de
aumentar el proceso alveolar o
mejorar las deficiencias de
tejidos blandos comienza con la
determinación precisa de la
posición de los dientes.
18. Aunque estos parámetros facilitan la determinación de la posición de los
dientes, definitivamente es necesario valerse de otros auxiliares para
determinarla ya que pueden existir variaciones de acuerdo con las
características individuales de cada paciente.
20. El color de los dientes es esencial en el resultado final de
cualquier tx estético, pero el tx no debe limitarse solo a eso,
mas cuando se trata de la reconstrucción con implantes.
Uno de los inconvenientes que se presenta con mayor frecuencia
con mayor frecuencia es la diferencia en cuanto a dimensiones
que hay entre un implante y los dientes naturales.
Un punto fundamental que debe considerarse es la proporción dentaria, la cual se
calcula dividiendo el grosor de la corona clínica entre su altura en milímetros.
Según Chiche las relaciones grosor-altura satisfactorias para los incisivos centrales
sup están entre 0.75 y 0.80
21. La determinación de la proporción
adecuada implica relacionarla con
parámetros tales como la cantidad de
tejido óseo, la posición de los
dientes, forma de la arcada y los
perfiles gingivales.
Wheeler establece que la
extensión mesiodistal y
bucolingual promedio a nivel
de la unión cemento-esmalte
varia de:
3.5 mm en incisivos
centrales inferiores.
10 mm en primera molar
superior.
El promedio del ancho
mesiodistal oscila entre 5mm
en incisivos centrales inf y
10mm primera molar inf.
La porción anterior del
arco es la zona más
delicada desde el punto
de vista estético.
24. Una vez que se han expuesto todas las variables que deben considerarse para
la reconstrucción óptima y estética de las arcadas dentales, es necesario
establecer un plan de tratamiento que satisfaga las expectativas tanto estéticas
como funcionales.
Para identificar deficiencias y desarrollar soluciones regenerativas
apropiadas, es necesario establecer una metodología que incluya la
restitución de la armonía dentaria. Dicha metodología incluye:
1. Encerado diagnóstico.
2. Mapeo del sitio receptor.
3. Elaboración de plantillas radiográficas y quirúrgicas.
4. Análisis radiográfico.
La planeación adecuada es parte fundamental en la obtención del resultado final
cuando se proporciona tratamiento de implantes dentales. El plan de tratamiento
completo debe considerar aspectos quirúrgicos y protésicos.
26. Los objetivos de la terapia con implantes incluyen la restauración de la forma y la función del sistema
estomatognático.
Este capítulo enfatiza la relación de todos los elementos que deben considerarse en la planeación del
tratamiento y, adicionalmente, el abordaje sistemático y los medios con los que se cuenta para determinar las
características de cada caso en particular, para poder contar con una expectativa real del tratamiento antes de
la realización de cualquier procedimiento, teniendo en cuenta que la prioridad de cualquier tratamiento
reconstructivo está encaminado a satisfacer las necesidades lógicas y las expectativas emocionales del
paciente
27. Mapeo del sitio receptor
Es un procedimiento que permite determinar el grosor del hueso alveolar antes de
levantar un colgajo mucoperióstico previo a la cirugía de implantes.
Requiere una serie de mediciones con un calibrador especialmente diseñado para
tal fin o con una sonda periodontal: Puntas penetran la mucosa previamente
anestesiada hasta alcanzar el hueso.
1. Nivel de la Cresta alveolar
2. Nivel medio aprox. 4 – 5 mm apical
3. Nivel profundo aprox. 10 mm apical de la primera medición
La relación de estas tres medidas indica los cambios en el grosor del hueso por debajo
de la cresta alveolar; los valores obtenidos se transfieren a un modelo de estudio
previamente seccionado en la zona donde se pretende colocar implantes, y es así
como se obtiene el grosor del tejido gingival y el perfil de la cresta alveolar para
tener una visión tridimensional del contorno óseo.
28. No es preciso pero es útil en la toma de
decisiones prequirúrgicas.
Este método consiste en colocar un
análogo del implante en el modelo
según la topología de la cresta con el
fin de seleccionar un pilar protésico
adecuado para la confección de la
restauración provisional cuando se
aplica el concepto de carga inmediata.
29. Guías quirúrgicas y radiográficas
Contornos de la restauración final.
La metodología de la función de las guías quirúrgicas se establece en función
de los requerimientos específicos de cada caso en particular.
Objetivo: brindar al cirujano un panorama preciso de los sitios ideales para la
colocación de implantes y su correspondencia con el perfil de emergencia
planeado de los pilares que soportarán la prótesis final.
30. Aspectos a considerar para la realización de esta es el patrón de resorción
ósea, el grosor y posición de los tejidos blandos y las limitantes anatómicas
propias de cada caso.
Es necesario plantear un enfoque tridimensional, lo que implica considerar la
posición en sentido oclusogingival, bucolingual y mesiodistal, para poder
establecer los perfiles emergentes para el tipo de restauración planeada.
Debe cumplir con tres requisitos fundamentales: estabilidad, visibilidad y
accesibilidad.
31. Estabilidad: cualquier movimiento o
distorsión que sufra puede alterar la
posición previamente seleccionada.
Visibilidad: el cirujano tenga la posibilidad
de tener un panorama adecuado de los
tejidos reflectados y de la guía en relación
con la cresta residual.
Accesibilidad: se logra incorporando al
diseño de la guía los medios necesarios
para que el cirujano tenga la libertad de
desplazar los tejidos sin que esto interfiera
en el asentamiento de la guía en la
posición previamente determinada.
32. La visión precisa previa a los procedimientos quirúrgicos del hueso de soporte
relacionado con los sitios elegidos evita las complicaciones que se presentan
cuando la cantidad de hueso es deficiente y no es aparente hasta la fase
quirúrgica.
Lo ideal es tratar de elaborar una guía radiográfica a partir del encerado
diagnóstico, probarlo clínicamente con el objeto de valorar el soporte labial,
los perfiles emergentes y demás requisitos indispensables para lograr
armonía.
De esta manera la guía relaciona con precisión la información obtenida a
partir de la tomografía computarizada con respecto al hueso residual y prevé
la posición y angulación de los implantes.
33. La modificación que se hace a la guía puede llevarse a cabo de tres maneras.
1. consiste en llenar los canales de la guía con un material radioópaco que sirva
como referencia,
2. consiste en cubrir todo el contorno de la guía con bario
3. es fabricarla con dientes radioópacos
34. Es necesario incorporar a esta elementos que sirvan como referencia para
corroborar la posición y angulación en la que se están preparando los sitios
durante el procedimiento quirúrgico
En los casos de maxilares totalmente edéntulos, se incorpora un poste de
paralelismo hacia el centro de la guía y la orientación del poste debe de ser
perpendicular al plano de oclusión propuesto para la restauración definitiva,
el poste sirve para que el cirujano dirija la inclinación de la fresa con
respecto a la orientación del poste de paralelismo.