Este documento trata sobre el shock. Define el shock como un estado persistente de hipotensión e hipoperfusión. Explica que el diagnóstico del shock es clínico y no depende de exámenes de laboratorio. Señala que la hemorragia es la causa más común de shock en pacientes traumatizados, y que la reanimación con líquidos y la intervención quirúrgica temprana son vitales para tratar el shock hemorrágico. También enfatiza la importancia de reconocer signos tempranos del shock como taquicard