Las técnicas de observación permiten a los docentes evaluar el aprendizaje de los estudiantes mientras ocurre y conocer sus conocimientos, habilidades, actitudes y valores. Existen dos tipos de observación: sistemática, en la que el observador se enfoca en aspectos específicos relevantes para la evaluación; y asistemática, en la que se registra toda la información posible de una situación de aprendizaje sin enfocarse en nada en particular.