1. Universidad Central de Ecuador
Facultad de Ciencias Médicas
Carrera de Medicina
Cátedra de Cirugía General
• Molina Katherine
Dr. Edwin Mendoza
10mo Semestre
4. Posición:
• Trendelenburg (en decúbito
supino, con la cabeza hacia
abajo en un ángulo de 30º
debajo de los pies) siempre
que su respiración no se vea
comprometida.
Administración de Oxígeno
• Se indica el uso de oxígeno con
flujo alto.
• Es necesario combinar el
suministro O2 + soporte de la
ventilación.
• Desde el uso de CPAP hasta la
ventilación mecánica.
Componentes del Tratamiento en General
5. Acceso Vascular
La prioridad en el
tratamiento es lograr un
acceso vascular para la
resucitación con líquidos y la
administración de
medicamentos.
“Shock compensado”, se
prefieren canulación venosa
periférica.
“Shock no compensado”, se
debe obtener un acceso
venoso central, o intraoseo
según la experiencia del
miembro del equipo de salud
y las circunstancias clínicas.
6. Resucitación con Líquidos
• El objetivo primario de la resucitación con líquidos es restablecer el
volumen intravascular y, de este modo, la perfusión de los tejidos. Se
requiere una resucitación con líquidos que sea rápida y agresiva para
tratar el “shock” hipovolémico.
7. Soluciones Cristaloides
Solución salina fisiológica o
Lactato Ringer son los líquidos
iniciales preferidos para la
reposición de volumen durante el
tratamiento del “shock”.
No cuestan mucho dinero, están
fácilmente disponibles y no
provocan reacciones de
sensibilidad.
Los cristaloides expanden de
manera eficaz el espacio
extravascular y corrigen el déficit
de sodio. Pero no son eficaces al
expandir el espacio intravascular.
Se necesita una gran cantidad de
solución cristaloide para
restablecer el volumen
intravascular.
Soluciones Coloides
Incluyen albúmina, plasma
congelado fresco, y expansores
plasmáticos sintéticos.
Las soluciones con coloides
contienen moléculas
relativamente grandes que
permanecen en el CIVA más
horas que los cristaloides
isotónicos. Son más eficaces
para expandir el volumen IVA.
Los coloides derivados de la
sangre pueden causar
reacciones de sensibilidad. Los
sintéticos pueden causar
coagulopatías.
8. Incio:
Se debe administrar 1-2 litros de cristaloides rapidamente 10-15 minutos;
la infusión posterior dependerá del grado de respuesta y las características
del paciente. Niños 20mg/kg, 5-10 minutos.
SH clase I y II:
Reanimar con soluciones cristaloides isotónicas utilizando la regla 3 a 1
(300 ml de cristaloides por cada 100 ml de sangre perdida) donde el
volumen de cristaloide de reposición es igual al triple de la pérdida
sanguínea calculada.
SH clase III y IV:
Reanimar con soluciones cristaloides 100 ml/kg (unos 7l para un adulto)
rápidamente en 4-6 horas o en 2-4 horas si hay shock.
Iniciar transfusión sanguínea:
• Por cada 4U de sangre hay que administrar 1U de plasma fresco.
• Por cada 10U de glóbulos rojos se debe administrar 5U de plaquetas.
• Administrar 1 gramo de calcio por cada 5U de sangre.
9. Monitoreo y Reevaluación
• Saturación de oxigeno (90%)
• Frecuencia cardiaca
• Presión arterial, PAM, PVC.
• Estado mental
• Temperatura
• Diuresis (0.5ml/kg/hora)
El estado del paciente con “shock” es dinámico. La monitorización continua y la
revaluación frecuente son esenciales para evaluar las tendencias en el estado del
paciente y determinar la respuesta al tratamiento.
10. Estudios Complementarios
Identificar la etiología y la gravedad
del “shock”
Evaluar si se produce disfunción de
órganos secundaria al “shock”
Identificar los trastornos
metabólicos
Evaluar la respuesta a las
intervenciones terapéuticas.
11. Soporte Farmacológico
Se utilizan agentes vasoactivos en el tratamiento del “shock” porque afectan la
contractilidad del miocardio, la frecuencia cardiaca, el tono del músculo liso vascular o
alguna combinación de estas acciones.
Algunas clases de agentes farmacológicos
comunes que se utilizan en casos de “shock”
son los inotrópicos, los inhibidores de la
fosfodiesterasa, los vasodilatadores y los
vasoconstrictores.
12.
13. Consulte con el Subespecialista
Usted debe reconocer las limitaciones del alcance de su práctica y la importancia de
pedir ayuda cuando fuese necesario.
La consulta temprana con un experto de una subespecialidad (p. ej., atención crítica,
cardiología, cirugía) es un componente esencial para el tratamiento del “shock” y
puede influir en el resultado.
Notas del editor
A veces es necesario combinar el suministro de oxígeno con el soporte de la ventilación. Esto puede incluir desde el uso de CPAP hasta la ventilación mecánica tras la intubación traqueal.