La pelvis es la región anatómica inferior del tronco que forma una cavidad ósea en forma de embudo. Las fracturas pélvicas se clasifican como estables o inestables dependiendo del mecanismo y dirección de la fuerza, y también como Tipo A, B o C dependiendo del grado de inestabilidad rotacional y vertical. El diagnóstico se realiza principalmente con radiografías, aunque se puede utilizar TAC en algunos casos. El tratamiento y rehabilitación varían dependiendo del tipo de fractura.